Al analizar los males existentes en el mundo, muchos de ellos creados por el propio ser humano hemos visto este vídeo con un buen mensaje que nos deja el Papa Francisco…
Al analizar los males existentes en el mundo, muchos de ellos creados por el propio ser humano hemos visto este vídeo con un buen mensaje que nos deja el Papa Francisco…
ACTIVIDADES
Actividades complementarias
ACTIVIDADES
Actividades complementarias
BUSCO ALGO MÁS
NICO MONTERO
Busco algo más
que de sentido a mis sentidos
que despierte el corazón
solitario, adormecido.
Y es que busco una razón
que sea razón a todos mis motivos.
Busco La Verdad
por encima de “verdades”
y es que busco esa Luz
que ilumine realidades
voy buscando un Corazón
de un amor inagotable.
Voy buscando algo más…
BUSCO ALGO MAS QUE DE SENTIDO
BUSCO ALGO MÁS QUE ME DESPIERTE
BUSCO ALGO MÁS QUE DE LATIDOS
A MI POBRE CORAZÓN
Busco algo más
que transforme mi egoísmo
y me descubra a los demás
como partes de mi mismo
voy buscando ser la sal
y ser la luz que alumbre los abismos.
Busco La Palabra
por encima de palabras
y es que busco una señal
una voz, una mirada
voy buscando en mi interior
el poder de su llamada.
Busca la voz de mi Dios…
BUSCO ALGO MAS QUE DE SENTIDO
BUSCO ALGO MÁS QUE ME DESPIERTE
BUSCO ALGO MÁS QUE DE LATIDOS
A MI POBRE CORAZÓN
Busco algo más,
Busco algo más que me llene.
Busco algo más
que de sentido a todo, a todo mi ser.
¿QUIÉNES SOMOS, DE DÓNDE VENIMOS, A DÓNDE VAMOS?
SINIESTRO TOTAL
Tras hacer el rato de meditación hemos recordado de qué va esto de estar preparándose 40 días..
QUÉDATE CON ESTO:
Confía y deja que Jesús sane tu corazón, te necesita en la FIESTA.
CUARENTA DÍAS…. ¡OTRA VEZ!
Y otra vez los malditos propósitos de siempre.
No, no, nada de esto es buena idea, ahora en serio. Ya sé, por empezar por algo, prometo que ya no bebo más, es que no sabes cómo me puse la última vez….pero ¡me lo pasé taaan bien! ¡Alucinas! Fue las risas…
Pff pero…40 días….¡otra vez! Casi nada… Y es que esta es, verdaderamente, la misma vieja historia que se repite año tras año: tratar de resignarme y vivir este tiempo de cuaresma, con la «Ley del mínimo esfuerzo». Si siempre digo lo mismo, y luego, como siempre, empiezo bien pero me entra el juicio sólo para cuatro días y ¡contento! con eso voy que chuto…Me propongo tantas cosas que luego no hago ninguna! Menuda pereza…es que estoy perdiendo de vista el objetivo. Me río por no llorar, porque…¿cuál es el objetivo?
¡Señor!, ¿No te das cuenta de que estoy perdido? ¡Cuaresma…40 días son demasiados! Oración, ayuno, penitencia, conversión, limosna, confesarse, comulgar, ser mejor, cambiar, ¿ayudar a los demás?…Te parecerá poco. ¿Todo eso para conseguir llegar a tu fiesta? Fiesta no…FIESTÓN va a tener que ser…porque vamos. Mira que cómo luego me aburra después de la paliza de viaje…vas a flipar… ¿de qué va todo esto? Jesús, realmente no entiendo, no creo ni lo acepto. ¿Por qué es todo tan difícil?
DEJA QUE ÉL MISMO TE LO CUENTE….
YO soy el camino, la verdad y la vida. Todo lo que te pido es que me sigas, va a ser duro, pero confía en mí. Esta fiesta promete.
Me da igual si vienes con vestido, falda, short, vaqueros, traje, corbata, pajarita, de elegante con tupé, sin tupé, más informal…con eso por supuesto vas a deslumbrar pero es clave que DESLUMBRES POR DENTRO y te sentirás aún más guapo y guapa si cabe y triunfarás fijo. Hazme caso, que yo de esto sé. Va a ser una fiesta diferente, otro rollo, pero que va a molar, ya lo verás.
Voy a necesitar ante todo TUS PIES, necesito TUS MANOS, necesito TUS OJOS, necesito TU FORMA DE SER, tu MEMORIA, tu VOLUNTAD, necesito TU COMPRENSIÓN, TU APOYO, TU CORAZÓN y tu alma. LA MEJOR VERSIÓN DE TI, TE NECESITO A TI.
Cuarenta días. Este es el tiempo que tienes para ponerte aún más guapo y guapa. Y luego dirás que no has tenido tiempo! Ojo, que si no llegas a tiempo la fiesta perderá su encanto. Y por si estos 40 días fueran poco tiempo te estoy dando además una gran oportunidad. Déjame sanarte interiormente, déjame darte mi Amor, déjame mostrarte mi perdón y mi misericordia. Esto es lo que te pido y te espero con los brazos abiertos, no me puedes fallar, todos los invitados cuentan y tú no eres menos!
Como te decía antes, sé que no es fácil, pero ciertamente es posible. El camino es largo y a ratos puede parecer aburrido y sin sentido. Te vas a cansar, desanimar, puede ser doloroso y difícil, pero acuérdate que estoy contigo, SIEMPRE contigo. Para convertir tu cansancio en ánimo, tu tristeza en alegría, tu pecado en gracia, tu soledad en compañía. Tampoco fue nada fácil para mí hacerlo hace ya dos mil años.
Estaba solo, hambriento, cansado, y también pasé por momentos de grandes tentaciones, de estar a punto de rendirme…pero tenía la seguridad de que mi Padre no me abandonaría. Escuché dentro de mi corazón: «Confía en MI». No dejes que estos cuarenta días sean nada más un cambio cuaresmal, «otra vez». Arriésgate a caminar conmigo, sé valiente y acepta el reto, haz de este camino de la cruz algo muy especial… un camino desde dentro del corazón.
¡Cuarenta días! Sí…otra vez, pero distintos! «CONFÍA EN MÍ”
Caminaremos JUNTOS hacia la LUZ de la PASCUA y…
Autor: Anónimo
Adaptación: Vanesa Tanco Pascual
Hemos comenzado la clase de hoy con un rato de silencio y encuentro con nosotros mismos a través de este cuento que nos transporta a un recorrido de obstáculos y dificultades. Este camino se parece al de la CUARESMA…pero al final merecerá la pena el sacrificio y el esfuerzo.
Voy andando por un sendero.
Dejo que mis pies me lleven.
Mis ojos se posan en los árboles, en los pájaros, en las piedras. En el horizonte se recorte la silueta de una ciudad. Agudizo la mirada para distinguirla bien. Siento que la ciudad me atrae.
Sin saber cómo, me doy cuenta de que en esta ciudad puedo encontrar todo lo que deseo. Todas mis metas, mis objetivos y mis logros. Mis ambiciones y mis sueños están en esta ciudad. Lo que quiero conseguir, lo que necesito, lo que más me gustaría ser, aquello a lo cual aspiro, o que intento, por lo que trabajo, lo que siempre ambicioné, aquello que sería el mayor de mis éxitos.
Me imagino que todo eso está en esa ciudad. Sin dudar, empiezo a caminar hacia ella. A poco de andar, el sendero se hace cuesta arriba. Me canso un poco, pero no me importa.
Sigo. Diviso una sombra negra, más adelante, en el camino. Al acercarme, veo que una enorme zanja me impide mi paso. Temo… dudo.
Me enoja que mi meta no pueda conseguirse fácilmente. De todas maneras decido saltar la zanja. Retrocedo, tomo impulso y salto… Consigo pasarla. Me repongo y sigo caminando.
Unos metros más adelante, aparece otra zanja. Vuelvo a tomar carrera y también la salto. Corro hacia la ciudad: el camino parece despejado. Me sorprende un abismo que detiene mi camino. Me detengo. Imposible saltarlo
Veo que a un costado hay maderas, clavos y herramientas. Me doy cuenta de que está allí para construir un puente. Nunca he sido hábil con mis manos… Pienso en renunciar.
Miro la meta que deseo… y resisto. Empiezo a construir el puente. Pasan horas, o días, o meses. El puente está hecho. Emocionado, lo cruzo. Y al llegar al otro lado… descubro el muro. Un gigantesco muro frío y húmedo rodea la ciudad de mis sueños…
Me siento abatido… Busco la manera de esquivarlo. No hay caso. Debo escalarlo. La ciudad está tan cerca… No dejaré que el muro impida mi paso.
Me propongo trepar. Descanso unos minutos y tomo aire… De pronto veo, a un costado del camino un niño que me mira como si me conociera. Me sonríe con complicidad.
Me recuerda a mí mismo… cuando era niño.
Quizás por eso, me animo a expresar en voz alta mi queja: -¿Por qué tantos obstáculos entre mi objetivo y yo?
El niño se encoge de hombros y me contesta:
-¿Por qué me lo preguntas a mí?
Los obstáculos no estaban antes de que tú llegaras… Los obstáculos los trajiste tú.
Autor: Jorge Bucay